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Direción de Jean Renoir.
Guion de Andre Paul Antoine y Jen Renoir.
Música de George Vans Parys.
Fotografía de Michel Kelber
Montaje de Boris Lewin.
Vestuario de Rosine Delamare
Intérpretes: Jean Gabin.-Francoise Arnaud.-María Félix.-Gianni Expósito.-Michel Piccoli.
Paris, Octubre de 1888, Mr.Danglard, propietario de una sala de espectáculos ve con intranquilidad que aunque a su cabaret siguen llegando buenos clientes, los ingresos van reduciéndose, mientras las deudas se van acumulando. Es un tenaz y peculiar empresario lleno de ideas, tiene como la principal figura de su negocio a una exótica bailarina del vientre, que a su vez es su amante, con lo que su espíritu empresarial le empuja a nuevos retos, abriendo un nuevo salón-cabaret bajo un novedoso espectáculo inspirado en el popular baile del can-can.
Niní, una grácil y bella lavandera, en una fiesta popular, es atraída por Mr.Danglard, al ver la gracia y picardía con que baila, la contrata para el nuevo espectáculo que está montando, y que revolucionará el mundo de la farándula con Nini como estrella principal, pese a la negativa de su novio, así como a rechazar los planes amorosos de un Príncipe balcánico perdidamente enamorado de Niní.
Lola de Castro, bailarina del vientre, figura principal del anterior espectáculo de Danglard, pone el grito en el cielo al ver como es postergada tanto en el lecho de Danglard así como su puesto de estrella principal. El Moulin Rouge, pronto alcanza fama por sus audaces bailes y sus atrevidas chicas, por lo que está siempre lleno, provocando situaciones no deseadas para Niní, ya que las envidias y los rencores van jalonando su vida.
Alegre y popular el can-can debe su popularidad al arte de dar el salto con una pierna en el aire, levantando faldones y enaguas, sus piernas vestidas con medias negras,ligas,encajes y seductores volantes. Las bailarinas del can-can, cautivan a los clientes del Moulin Rouge. algunas destacadas bailarinas se convirtieron en símbolos del cabaret atrayendo a artistas como Henry Toulouse-Lautrec, que inmortaliza en sus pinturas y carteles, escenas de baile plenas de colorido y sensualidad.
Esta película de Jean Renoir, es un claro resumen de la última época de Pierre Auguste Renoir, y un claro acto de amor a la obra del padre, algunas escenas evocan directamente el arte creativo de su progenitor. El uso del color armoniza con un sentido característico propio de la época, pero también a través de la evocación del Paris de la «Belle Epoque». Significó la ocasión de realizar una película de raíz popular, mediante la exploración del color en el cine después de realizar «El Rio» de 1959 y «La Carroza de oro» de 1953. También le permitió volver trabajar con actor mas apreciado, Jean Gabin; con el que había trabajado en «Los bajos fondos» de 1936 y «La gran ilusión» de 1937. Otras grandes obras de Jean Renoir, son «Una partida de campo» de 1936.-La regla del juego» de 1939 o «Esta tierra es mía» de 1943.
Como curiosidad, recordemos al director de fotografía Michel Kelber, trabajó en el Cine Español a traves de Rafael Gil, en las películas «La noche del sábado» de 1950.-«El gran Galeoto» de 1951.-«El Litri y su sombra» y «La Casa de la Troya» ambas de 1959.-«Rogelia» de 1962.-«Sangre en el ruedo» de 1969.